Ensalada tropical diurética
En septiembre intentamos volver a la senda de los buenos hábitos y aplicarnos el dicho de mente sana en cuerpo sano. Muchos se plantean en la primera semana de septiembre dos horas al día al gimnasio, tres comidas al día a base de ensalada y convertirse en la versión oficinista de la maníaca de Flashdance, trabajando de día y sudando la gota gorda por la noche.
A estas alturas, comenzando la segunda semana de septiembre, las agujetas ya te habrán dado un baño de realidad. No eres soldadora y bailarina, te duele cada parte de tu cuerpo y estás aburrido de comer lo que para ti parece pasto para las vacas. Te recomendamos ejercicio habitual, pero adaptado a tu forma física y una alimentación variada y sana. Os dejamos una receta de ensalada tropical diurética, muy sabrosa y perfecta para afrontar la retención de líquidos, que os ayudará a paliar la herencia recibida del verano. Además, recuerda que Jennifer Beals tuvo una doble en algunas escenas.
A la hora de preparar una ensalada tropical, podemos utilizar infinidad de ingredientes. En este caso, os recomendamos para elaborar unas cuatro raciones de esta ensalada tropical diurética: 100 gramos de mandarina, 100 gramos de piña, 100 gramos de fresones, 100 gramos de mango, un puñado de pasas, 100 gramos de kiwi, 150 gramos de queso fresco tipo burgos, unas cuatro o cinco hojas de lechuga, una naranja, aceite de oliva virgen extra, pimienta y sal.
Comenzamos echando las uvas pasas en un recipiente con agua fría. De esta manera se hidratarán y se hincharán.
Por otra parte, preparamos el resto de las frutas. Pelamos el mango, le sacamos el corazón y lo cortamos en pequeños dados. Lavamos los fresones, les quitamos las hojas y los dividimos aproximadamente en cuatro partes. Pelamos el kiwi, lo cortamos en rodajas y también sacamos la piel de las mandarinas, separando los gajos.
Si utilizamos piña natural, cortamos la piel, separamos unas rodajas y las cortamos en taquitos. Lavamos las hojas de lechuga y reservamos. Exprimimos la naranja hasta tener unas tres cucharadas soperas de su zumo.
Preparamos una vinagreta con el zumo de naranja, la pimienta y la sal y añadimos el aceite de oliva virgen extra. Montamos en un bol la ensalada con todos los ingredientes, añadiendo unos taquitos de queso de burgos y aderezamos con la vinagreta.
Si nos apetece añadir más energía a esta ensalada utilizando hidratos de carbono y convertirla en un plato principal, podemos incluir unos 200 gramos de pasta cocida o frutos secos, como las almendras.